Caminar Siempre Adelante
POR JOAN EGEA BARBER
08/01/2025
CAMINAR SIEMPRE ADELANTE: PERMANECER ALEJADO DE LO QUE TEMES TE DESMOTIVA
La vida está llena de desafíos, miedos y aparentes fracasos, pero cada uno de estos elementos, cuando los enfrentamos, se convierte en un escalón hacia una versión más fuerte, segura y motivada de nosotros mismos.
Evitar lo que tememos nos estanca, nos desmotiva y nos aleja de nuestro potencial. Por el contrario, avanzar hacia esos temores y desafíos nos impulsa a crecer, desarrollarnos y mantenernos motivados.
El Fracaso No Existe Si No Te Rindes. Cambia la idea de Fracasar por Aprender.
El fracaso es solo real cuando decides rendirte. Cada intento fallido puede representar una lección invaluable si lo abordas con la mentalidad adecuada.
¿Qué ocurre cuando cambias la idea de "fracasar" por "aprender"? Cada paso te acerca más a tu meta, incluso si no lo logras a la primera. Siempre y cuando esta sea una meta con valores éticos.
Por ejemplo, imagina que estás intentando cerrar una negociación importante. Puede que el cliente diga que no, pero ese "no" te ofrece la oportunidad de reflexionar, ajustar tu enfoque y volver con una mejor propuesta. Si continúas en el juego, el fracaso deja de existir.
- Ejercicio práctico: Haz una lista de cosas que te gustaría intentar pero temes fracasar. Para cada una, escribe un plan de acción que incluya cómo aprender de cada intento y mejorar en el siguiente.
Haz las Cosas que Más te Desafían
La zona de confort o de comodidad es el mayor enemigo de la motivación. Cuando evitamos lo incomodo o desafiante y optamos por lo sencillo, nuestra capacidad para crecer y motivarnos se debilita.
Enfrentar desafíos, incluso aquellos que nos generan ansiedad o incomodidad, nos ayuda a expandir nuestras habilidades y nos aporta un sentido de logro.
Imagina que en tu jornada laboral, siempre pospones las tareas más complicadas. Cambia el enfoque: comienza por lo más difícil y observa cómo esa sensación de logro inicial impulsa tu motivación para el resto del día.
- Ejercicio práctico: Identifica tres tareas o actividades que consideres desafiantes. Planifica enfrentarlas primero cada día durante una semana y registra cómo afecta tu nivel de motivación.
Haz lo que Temes: Enfrentar el Miedo como Motor de Motivación
El miedo es una barrera natural, pero también es una herramienta poderosa cuando lo enfrentamos. Cada vez que avanzamos hacia algo que tememos, fortalecemos nuestra confianza, inspiramos a otros y, lo más importante, a nosotros mismos.
Por ejemplo, si tienes miedo de hablar en público, participar en una reunión importante o abordar una conversación difícil, enfrentarlo no solo te ayudará a superar ese miedo, sino que también te llenará de energía y confianza.
El coraje no es la ausencia de miedo, sino la decisión de actuar a pesar de él. Como decía un sabio: "El valor se construye con acciones, no con palabras".
- Ejercicio práctico: Escribe una lista de cinco cosas que te asustan. Comprométete a enfrentarte a una de ellas hoy mismo, y reflexiona sobre la experiencia.
La Motivación es Dinámica y está en el Movimiento
La motivación no es algo que simplemente encuentras; es algo que creas. Caminar hacia lo que temes, enfrentarte a los desafíos y redefinir el fracaso son los pequeños trucos que te recargan de energía y te mantienen en marcha.
Cada paso que das hacia lo desconocido, cada reto que aceptas y cada lección que aprendes es una inversión en ti mismo. Así es como transformas la desmotivación en una fuente inagotable de energía para avanzar.
Recuerda que permanecer alejado de lo que temes te desmotiva; enfrentarlo, te transforma.
Joan egea Barber.